Preguntas frecuentes
En el gratuito, usted ya puede tener su sepultura gratis. Con todos los extras, incluido la edición de su árbol genealógico (en preparación), etc... La única limitación es que tendrá un espacio máximo de 2 Gigabytes para guardar sus datos. Mientras no pase de ese tamaño, podrá disfrutar de su sepultura para siempre. El registro Premium, es para tener un espacio de 100 Gigabytes (que esperamos aumentar gratuitamente en el futuro hasta un 1 Terabyte). Usted puede subir durante el primer año todo lo que estime necesario hasta completar su espacio. Sólo deberá renovarlo anualmente si va a continuar subiendo datos al año siguiente y no completó en el anterior sus 100 Gigabytes. Ambas sepulturas, una vez creadas, ya son para siempre.
Significa que cualquier persona que encuentre su sepultura en nuestro cementerio o por internet, podrá entrar en ella libremente. Tal como usted la ideó, tal se verá y nadie jamás podrá modificarla ni descargar su contenido tras su fallecimiento. Si no quiere que esto ocurra, dele privacidad y ciérrela. Entonces sólo se podrán acceder con contraseña aquellas personas que usted autorice. También puede establecer la fecha en que su tumba cerrada o privada será abierta a todo el mundo. No obstante todas las sepulturas cerradas o privadas, si no han sido heredadas, se abrirán a los 20 años desde la última vez que su propietario entró en ellas. No podrán, por tanto, permanecer cerradas para siempre.
Sí puede, tanto para el caso de sepultura cerrada como abierta. Por ejemplo, en caso de sepultura abierta, usted puede crear una carpeta X que desea que se abra en una fecha muy posterior determinada por usted, por ejemplo tras su fallecimiento. Usted puede llenar esa carpeta con la documentación sensible que desee y que permanecerá oculta mientras hace su sepultura. En la fecha que usted determine, esa carpeta aparecerá como por arte de magia en su sepultura y desvelará el contenido que con tanto celo usted preservó hacia el futuro.
Sí puedes. En cualquier caso debe hacerse desde una sepultura cerrada o privada. Simplemente comparta el enlace de la sepultura con las personas allegadas que desee y éstas podrán visitar su sepultura. Para editar entre varios usuarios una sepultura, es necesario que compartan el nombre de usuario y la contraseña del creador de la sepultura. De este modo, todos los que guarden material biográfico y digital del difunto, podrán aportarlo a la sepultura.
Sirve para que usted lo imprima y lo adjunte a la tumba física del difunto. Cualquier persona que lo lea con el móvil, accederá a la sepultura digital que usted creó en nuestro cementerio virtual. Estamos trabajando en que ofrezca sólo una ficha simplificada del difunto, con sus datos más relevantes. Este código también se puede gravar en el mármol y esperamos ofrecerlo pronto en formato de pegatina para adherir fácilmente a la sepultura. Recuerde que si regenera el enlace privado de su sepultura, tendrá que volver a imprimir el código QR porque habrá cambiado.
Sí. Tanto en el caso de testamento abierto como ológrafo, podrán ser guardados en su sepultura. Con independencia de la existencia del documento original, es recomendable firmar digitalmente dicho documento.
Por supuesto. Estamos trabajando en un sistema fácil para la transmisión segura de las sepulturas digitales que estén protegidas. No obstante, siempre prevalecerá lo que la legislación aplicable determine sobre la transmisión del patrimonio digital de las personas.
Sin duda. Cualquier contenido derivado del trabajo intelectual, artístico y profesional en general, como memorias inéditas, libros, relatos, confidencias, fotos, reportajes, videos, películas, partituras, canciones, planos, proyectos de ingeniería, patentes, etc....tiene perfecta cabida en su sepultura. Los herederos podrán cobrar a los visitantes tanto por la consulta como por las descargas. Si lo hacen a través de nuestra Web, se les cobrará un porcentaje por los gastos de gestión. Toda esta documentación podrá ser protegida con marca de agua cuando se solicite.
Mientras sean heredados, pertenecerán a su familia y estarán gestionados conforme a su última voluntad. Desde el instante en que su sepultura pase al estado de tumba abierta, pasarán a reposar para siempre en nuestro cementerio, que sin ser propietario de los mismos, será el responsable de velar por la permanencia de éstos, para conocimiento de sus descendientes y cualquier interesado en conocer su existencia, que es el fin esencial de este cementerio digital: dar testimonio de su vida.
Sí. Puedes ponerles varios fondos, incluso el fondo que tú desees. Estamos trabajando en poner más fondos y algo más de ornamentación, siempre buscando generar un espacio de respeto y ceremonial. Queremos que las sepulturas sean lugares para la memoria y el recuerdo, dónde repose ordenadamente y para siempre, el patrimonio digital del difunto, con seriedad y solemnidad.
No es obligatorio, pero sí recomendable. Es un modo de presentar a los invitados, herederos y generaciones futuras, el rostro del creador de la sepultura, comentando en vida, cualquier cosa que quiera destacar de su existencia, de la estructura de su sepultura o de cualquier otro tema de su interés. Se puede omitir al entrar en la sepultura.
Es sin duda el lugar más seguro del mundo para guardar todos sus datos para siempre. La llamada "nube" no es más que cientos de servidores, físicos y virtuales, dedicados a conservar y proteger sus datos, creando copias de seguridad diarias para garantizar que jamás pierda un sólo byte de información. Guardar todas sus datos en discos externos, dvds, ordenadores personales o unidades Nas y otros medios digitales, ya es obsoleto e incluso poco recomendable por la continua rotura y fallos técnicos en este tipos de soportes.
Tus datos SON PARA NOSOTROS INNEGOCIABLES. Se protegen a través de la nueva ley de protección de datos (LOPD 2018), que prevé todo un armazón jurídico que garantiza la confidencialidad de los datos que se desean preservar y que regula los protocolos a seguir para la cesión, uso, publicación, derecho al olvido y consentimiento, a la hora de regular el patrimonio digital personal. Las condiciones para el consentimiento se han fortalecido, y las empresas ya no podrán usar términos y condiciones indescifrables, repletos de jerga legal, ya que la solicitud de consentimiento debe darse en una forma inteligible y de fácil acceso. El propósito es que sea tan simple y rápido retirar el consentimiento como darlo. La nueva legislación prevé sanciones importantes para los incumplimientos de la misma.